Subamos, podemos conseguirlo
sábado, 27 de septiembre de 2008
Bien+Bien
La noticia de impulsar el Consejo Económico y Social me parece interesantísimo para los que pensamos que es buena la aportación de todos, con idea de diversificar nuestro pueblo económicamente.
Espero y deseo que se tenga suerte en la elección de los miembros del mismo, auguro en estos tiempos entrega de todos los componentes, y que asuman el compromiso, por el bien de su pueblo.
Al mismo tiempo, que gocen de ayuda y autonomía, para que puedan alcanzar y mostrar a los gobernantes nuevas iniciativas, en cuanto al desarrollo económico, y modelo de Ciudad en todos los sentidos.
Me considero un admirador y consumista de nuestros ricos caldos, suelo pedirlos cuando viajo por toda España: me duele no encontrarlos con facilidad, y por supuesto aumenta cuando el caso ocurre en Andalucía: de la misma manera, seria deseable que los subproductos que salen en estos tiempos de la Uva y la Aceituna, gracias a las nuevas tecnologías, generen industrias en la localidad para no exportarlos todos fuera como se viene ejecutando en la actualidad.
Por otro lado según cometan se perderán otras 900 hectáreas mas, y curiosamente, 900 personas de un vecino pueblo a la Vendimia Francesa y según lo publicado últimamente afectara a nuestros finos el cambio climático
Puede que este consejo tenga la posibilidad de recodar el desarrollo de un Polígono aun incompleto lleno de supuestas especulaciones: eso ya es agua pasada, existe otro de mayor capacidad, por lo que se tiene una oportunidad de oro.
Mantengo mi titular en lugar de denominarme por ejemplo, “INGLIS PIQUINGLIS”: me resisto, y apuesto para repartir responsabilidades, y trabajar objetivamente por la realidad en, “La Montilla que Queramos”
“He dicho”
Un cordial saludo. José Luis
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Espero y deseo que se tenga suerte en la elección de los miembros del mismo, auguro en estos tiempos entrega de todos los componentes, y que asuman el compromiso, por el bien de su pueblo.
Al mismo tiempo, que gocen de ayuda y autonomía, para que puedan alcanzar y mostrar a los gobernantes nuevas iniciativas, en cuanto al desarrollo económico, y modelo de Ciudad en todos los sentidos.
Me considero un admirador y consumista de nuestros ricos caldos, suelo pedirlos cuando viajo por toda España: me duele no encontrarlos con facilidad, y por supuesto aumenta cuando el caso ocurre en Andalucía: de la misma manera, seria deseable que los subproductos que salen en estos tiempos de la Uva y la Aceituna, gracias a las nuevas tecnologías, generen industrias en la localidad para no exportarlos todos fuera como se viene ejecutando en la actualidad.
Por otro lado según cometan se perderán otras 900 hectáreas mas, y curiosamente, 900 personas de un vecino pueblo a la Vendimia Francesa y según lo publicado últimamente afectara a nuestros finos el cambio climático
Puede que este consejo tenga la posibilidad de recodar el desarrollo de un Polígono aun incompleto lleno de supuestas especulaciones: eso ya es agua pasada, existe otro de mayor capacidad, por lo que se tiene una oportunidad de oro.
Mantengo mi titular en lugar de denominarme por ejemplo, “INGLIS PIQUINGLIS”: me resisto, y apuesto para repartir responsabilidades, y trabajar objetivamente por la realidad en, “La Montilla que Queramos”
“He dicho”
Un cordial saludo. José Luis
lunes, 1 de septiembre de 2008
Ademas de nuestro ricos caldos trabajamos por las nuevas industria y modenizar Montilla .(Comparemos)
Es evidente que el panorama del vino y del viñedo español está cambiando de forma radical. Aparecen nuevas zonas, algunas de gran interés, nuevos bodegueros, en demasiados casos con viejas ideas pero también gente joven con ganas de hacerlo realmente bien y creyendo que la clave está en el viñedo.
Pero este cambio no es siempre positivo. Estamos generando eso que llamamos uniformidad del gusto, la globalización del estilo de los vinos y contra eso tenemos que luchar todos los días. Cada uno con nuestras armas. El consumidor exigiendo y los profesionales siendo eso, profesionales.
Hemos hablado ya de numerosas causas para esa uniformidad. Voy a dar ahora una serie de datos que nos pueden ayudar a entender todavía más los problemas que generan estos cambios.
En Rioja en 1983 las hectáreas inscritas eran 38.349. En 1990 había 43.074 hectáreas con una producción ese año de 161 millones de litros, lo que daba un rendimiento medio de 3.743 litros por hectárea. En el año 2006 las hectáreas ya eran 60.390, es decir, 17.316 más. La producción fue de 276 millones de litros lo que supone un rendimiento de 4.573 litros por hectárea.
En Ribera del Duero en 1989 había 9.146 hectáreas, de las que el 57% tenía más de 40 años. Hoy hay 20.711 hectáreas de las que el 46,41% se plantaron después del año 1996 y más del 16% son viñas plantadas en el siglo XXI.
En Navarra en 1984 la Garnacha representaba el 84,45% del total del viñedo. En 2005 representa sólo el 25,72%. En 1984 el Merlot era inexistente hoy representa el 12,45%. En el año 1990 la producción fue de poco más de 66 millones de kilos de uva en el año 2005 superó los 145 millones.
Más hectáreas, viñedos más jóvenes, cambios en las prácticas culturales de cultivo, rendimientos más altos, más presencia de la madera, en 1990 en Rioja había 547.000 barricas, en 2006 la cifra era de 1.197.000, más modernidad, menos particularidad. Vinos más iguales.
Tags: ribera del duero, rioja, navarra, vinedo
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Pero este cambio no es siempre positivo. Estamos generando eso que llamamos uniformidad del gusto, la globalización del estilo de los vinos y contra eso tenemos que luchar todos los días. Cada uno con nuestras armas. El consumidor exigiendo y los profesionales siendo eso, profesionales.
Hemos hablado ya de numerosas causas para esa uniformidad. Voy a dar ahora una serie de datos que nos pueden ayudar a entender todavía más los problemas que generan estos cambios.
En Rioja en 1983 las hectáreas inscritas eran 38.349. En 1990 había 43.074 hectáreas con una producción ese año de 161 millones de litros, lo que daba un rendimiento medio de 3.743 litros por hectárea. En el año 2006 las hectáreas ya eran 60.390, es decir, 17.316 más. La producción fue de 276 millones de litros lo que supone un rendimiento de 4.573 litros por hectárea.
En Ribera del Duero en 1989 había 9.146 hectáreas, de las que el 57% tenía más de 40 años. Hoy hay 20.711 hectáreas de las que el 46,41% se plantaron después del año 1996 y más del 16% son viñas plantadas en el siglo XXI.
En Navarra en 1984 la Garnacha representaba el 84,45% del total del viñedo. En 2005 representa sólo el 25,72%. En 1984 el Merlot era inexistente hoy representa el 12,45%. En el año 1990 la producción fue de poco más de 66 millones de kilos de uva en el año 2005 superó los 145 millones.
Más hectáreas, viñedos más jóvenes, cambios en las prácticas culturales de cultivo, rendimientos más altos, más presencia de la madera, en 1990 en Rioja había 547.000 barricas, en 2006 la cifra era de 1.197.000, más modernidad, menos particularidad. Vinos más iguales.
Tags: ribera del duero, rioja, navarra, vinedo
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