Al menos para mi, continua Febrerillo el loco.

Al ver los dos capítulos emitidos por Televisión Española del comportamiento del Rey en el golpe de estado del 83, en primer lugar me recuerda, el golpe, y que gracias al Rey disfrutamos en España de democracia, y cómo alardeaba yo, viendo el mensaje en el Hotel Azafata de Valencia, expresando a los compañeros, míralo, sino esperaba menos, si nació el mismo año que yo, y es de mi quinta. No se trataba de ego alguno más bien de satisfacción y necesidad.

Los dos lo pasamos mal, él por supuesto peor por la responsabilidad y lo que se jugaba, y en mi caso, porque por mi profesión de comerciante me encontraba en la Feria del Juguete y tuve la mala suerte de ver grandes juguetes por las calles de Valencia. Que tanques más grandes Dios mío... No es fácil olvidar como estaba la “entrañable” Plaza del Caudillo para los golpistas, uno de los tanques, el cañón, estaba casi metido en el despacho del Alcalde

Estábamos en esos momentos en el Stans de Muñecas Famosa y la salida al aparcamiento fue de locos, y el recorrido como podías, y con un trafico atroz y descompuesto, mucho jaleo, y continuamente el parte de guerra. Lo primero fue llamar a los compañeros de Jaén que quedamos con ellos como otra noche en la Cafetería Lauria, y cuando hablamos contaban lo que se encontraron en la plaza, y lo que vieron; podías llorar, o tomártelo a cachondeo

Circulando pasamos por varios Ayuntamientos tomados por el ejercito, y colas asombrosas en las panaderías Por fin llegamos al Hotel Azafata muy cerca del aeropuerto, y no se cuantos aviones salían y llegaban en esa noche pero el ruido era asombroso. Los nervios no nos dejaron centrarnos y no había forma de llamar fuera de Valencia, y a través de unos amigos de Valencia llamaron a mi casa y fue curioso porque mi señora estaba con mi madre, y como había pasado la otra guerra, le dijo. Hay Antoñi, que a tu marido le ha tocado en la zona nacional. La pobre.

Cuando hablo el Rey, todos viéndolo con una camaradería inaudita, descansamos un rato y a las seis regresamos para Andalucía y no paramos hasta pasado despeñaperros, y comiendo, expresamos, el que quiera juguetes que venga a Valencia por ellos, y si prefiere a Famosa, que la vea en la TV.

Como curiosidad me dieron nauseas terminando de ver la proyección y pude ver como se mantienen los golpistas de salud, y pensionistas del estado. Pobrecitos ¿les habrá quedado la pensión minima?

Pero es que días antes tuve la oportunidad y la mala suerte de ver a Tejero que esta como un roble, mas sano que una pera, con las mimas ideas y paseando con uno de sus hijos sacerdote, para protegerlo de todo mal

A otros en cambio que luchamos por la democracia, por haberle dicho tantas cosas ese día, a mí en concreto, me ha castigado alguien y me ha mandado un cáncer,

Si existe el Cielo confío que Jesucristo cumpla con lo que dijo, y no me encuentre a ninguno de ellos allí.

Que pocos se acuerdan de los trabajadores para estas cosas.

Un cordial saludo